Comenzar un negocio sea cual sea el área no es para los débiles de voluntad y corazón. Este articulo pretende guiarte a través de las fases para iniciar tu propio negocio a pesar de que es un proceso demanda tiempo y atención el mismo está lleno de satisfacciones personales, sociales y económicas
Eureka!
Desarrolla una idea. No empieces un negocio solo porque algo está de moda o porque piensas que comercializarlo te dará dinero. Desarrolla un concepto de negocios que te apasione relacionado con algo en lo que tengas cierta experiencia. Después, piensa en un producto o servicio que creas que mejorará la vida de la gente.
Descubre tus habilidades. No todos tienen lo necesario para iniciar un negocio, eso no quiere decir que tu idea no sea brillante, solo que tal vez no cuentes con algunas características de personalidad vitales para lanzar tu empresa. Antes de invertir tiempo o recursos, evalúate y ve si cuentas con las habilidades típicas de un emprendedor
Prueba tu credibilidad. Una vez que tengas una idea descubre cómo puedes convertirla en realidad. ¿El producto es algo que la gente quiere o necesite? ¿Puedes tener ganancias vendiéndolo? ¿Funciona?
Elabora un plan de negocios. Un plan de negocios sólido te guiará hacia adelante. También lo necesitarás para presentar tu idea a los inversionistas potenciales. Debe incluir una misión, un resumen ejecutivo, un resumen de la empresa, muestras del servicio o producto, una descripción de tu mercado objetivo, proyecciones financieras y el costo de las operaciones.
Identifica tu mercado. Aunque hayas detectado algún interés en tu negocio, necesitas hacer más tarea. Evalúa el mercado para que le vendas a las personas que seguro realizarán la compra. Haz una evaluación competitiva.
Inversion
Determina los costos. Haz investigaciones adicionales y conoce los costos estándar dentro de la industria. Esto no solo te ayudará a manejar el negocio más eficientemente, también será información valiosa para los inversionistas.
Establece un presupuesto. Una vez que determines cuánto dinero tendrás para trabajar, descubre cuánto necesitas para desarrollar tu producto o servicio y crea un plan de marketing.
Encuentra a los inversionistas adecuados. Vas a necesitar algún tipo de financiamiento al comenzar, ya sea de tus ahorros, tarjetas de crédito, préstamos, capitalistas de riesgo o donaciones. Encuentra a un inversionista que comparta tu pasión, alguien con quien creas que puedes trabajar. Escucha a los inversionistas. Te guste o no, estos tendrán una opinión cuando se trate de tu empresa. Escucha sus consejos y sugerencias, pero eso no quiere decir que tengas que hacer todo lo que te digan.
No te preocupes por una oficina. Si no estás obteniendo ganancias, no te mortifiques por adquirir un espacio para trabajar, puedes hacerlo desde casa. Escoge un local que se adecúe a las necesidades de tu negocio, uno que ofrezca una oportunidad para el crecimiento, el nivel adecuado de competencia y cercanía para los proveedores. También debe ser accesible para los clientes.
Prepárate para las citas de negocios. Cuando te prepares para la junta con un cliente, lee todo lo que puedas sobre la industria, tu competencia y la empresa de ese cliente.
Legal
Determina la estructura legal. Determina qué te conviene más: ser el único propietario, tener un socio, una sociedad de responsabilidad limitada, una corporación S, una organización sin fines de lucro o una cooperativa.
Selecciona el nombre de tu empresa. Decide un nombre que vaya con tu marca, luego ve si ese está disponible y si lo puedes usar libremente en tu país y estado. Si el nombre que quieres está disponible, regístralo lo antes posible en las oficinas correspondientes.
Ten un gran sistema de apoyo. Vas a invertir mucho tiempo y recursos en tu nueva aventura empresarial. Asegúrate de que tu familia esté de acuerdo. Deben estar conscientes de que este proceso los retará en lo económico y emocional. Comparte tus ideas con amigos y familia. Las personas más cercanas son las que serán más honestas contigo sobre tu idea. No dudes en buscar sus consejos y sugerencias.
Producto/Servicio
Entrega el producto o servicio rápido. Como dice el fundador de LinkedIn “Si no te avergüenza el primer lanzamiento de tu producto lo diste a conocer muy tarde”. Tu negocio es un trabajo en proceso y si lanzas un producto o servicio rápidamente, serás capaz de construir una comunidad de clientes que te podrán proveer retroalimentación valiosa que te ayudará a mejorar tu oferta.
Ofrece nuevos productos o servicios. Si ya tienes clientes asegúrate de cuidarlos dándoles nuevos productos o servicios.
Entrega más de lo que te pidan al principio. Una vez que tengas un nuevo cliente asegúrate de ir más allá por lo menos el primer mes. Tendrás a ese cliente enganchado.
No tengas miedo de la competencia. Dentro de las fases para iniciar tu propio negocio esta es muy importante, así que no hables mal de la competencia cuando estés con inversionistas o clientes. De hecho, hablar de esta forma tal vez haga que los clientes se vayan con la competencia que ofrece un producto o servicio que tú no das. Recuerda, cuando la competencia se vaya, habrá un mercado para tu negocio. Usa ese conocimiento como inspiración para hacer las cosas mejor que tu rival.
Publicidad y Marketing
Contrata a un redactor. A menos que sepas escribir muy bien, contrata a alguien que redacte los mails para los clientes objetivos. Este también te ayudará con los comunicados de prensa y otras cosas que darán a conocer las novedades de la empresa.
Publica en tus redes todo el tiempo. No te avergüences de compartir tus triunfos y luchas. Los clientes disfrutarán tu honestidad.
Aprovecha los recursos gratis. Estos pueden ser las redes sociales o hasta una persona que te ofrezca consejos y experiencia para sacar adelante tu start-up.
Benefíciate del boca en boca. Nada vence a un buen marketing de boca en boca. Deja que tus amigos, familia e influencers divulguen lo que hace tu producto o servicio.
Fases para iniciar tu propio negocio